Los matemáticos dirían que la fecha de hoy es una cifra capicúa. Los lingüistas dirían que es un número palíndromo, que se lee igual de izquierda a derecha o de derecha a izquierda. Uri Geller diría que hay un aura sobrenatural en torno al día hoy. Celebrémoslo
¿Cómo de especial es realmente la fecha de hoy? Si buscamos otras fechas capicúas de siete cifras a lo largo de esta década, los tres números de en medio tendrán que ser 020. Esto ocurrirá forzosamente en el mes 10 (octubre), de manera que en toda la década veremos solo nueve fechas palíndromas con ese formato. De hecho, ya hemos visto seis:
1/10/2011
2/10/2012
3/10/2013
4/10/2014
5/10/2015
6/10/2016
7/10/2017
8/10/2018
9/10/2019
Claro que las fechas pueden escribirse de muchas otras maneras. Si usamos dos cifras en el mes y el día, obtendremos palíndromos de ocho cifras. Caerán siempre en febrero, para que los números centrales sean 0220:
01/02/2010
11/02/2011
21/02/2012
Si no escribimos el año completo, los palíndromos serán más fáciles de ver. El año pasado tuvimos varios: 5/1/15, 5/10/15, 5/11/15, 5/12/15. El 11/11/11 fue una fecha capicúa memorable, especialmente a las 11:11:11 de la mañana.
El calendario juliano, promulgado por Julio César, es el precursor del calendario gregoriano que usamos actualmente
Si estás en Estados Unidos, donde se escribe primero el mes y después el día, la cosa cambia un poco. De nuevo, dependerá de cuántas cifras escribas.
Hay fechas capicúas de ocho cifras:
01/02/2010
11/02/2011
Y fechas capicúas de siete cifras:
1/10/2011
2/10/2012
3/10/2013
4/10/2014
5/10/2015
6/10/2016
7/10/2017
8/10/2018
9/10/2019
De hecho, si reducimos un poco más el número de cifras, podemos decir que el año pasado hubo una semana entera de fechas capicúas:
5/11/15
5/12/15
5/13/15
5/14/15
5/15/15
5/16/15
5/17/15
Al final, lo único que tienen de especial estas fechas es que son divertidas coincidencias numéricas. La numerología intenta darles un significado más allá de eso, pero solo hay que ver que se escriben de formas distintas en todo el mundo para darse cuenta de que no tiene mucho sentido.
Así que no, probablemente no ocurra nada paranormal de aquí a que termine el día (lo siento, Uri Geller).
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